sábado, 11 de abril de 2009

Fe?


Hoy te vi, cómo hace semanas no te veía. Sin embargo, no abrías tus ojitos, estás mal. Pero sé que en el fondo sabes que estuve contigo hoy, pues tomaste firmemente mi mano cuando me iba, como pidiéndome lo contrario. No sabía qué decir ni hacer, pues verte así no es cotidiano para mi, pero sí sentía la necesidad de acariciar tú mano, como para que sintieras mi presencia.
La gente que sabe, dice que no te recuperaras, que no tienes remedio, y que quizá no avances nada en consideración de cómo estas ahora; yo no difiero mucho de aquello, pero sí tengo la fe de que algo haras por tí, sea lo que sea.
Aveces uno se olvida a quién uno se arrodillaba cuando era pequeña con las manos semicruzadas frente a mi cama y a una imagen de Él. A Él le pedía por algo que quería. Ahora si bien no soy de aquellas personas aferrada a la fe, sí creo que un diálogo con Él de vez en cuando hace bien, pero llevo conversándole hace mucho tiempo, de tí y de más cosas que hasta el momento no sé sin son para bien o no.
Solo seguiré dialogando con Aquel que no me da respuestas aun, y lo haré solo porque sé que algun día lo hará mediante algún hecho, que tengo la certeza será por el bien de todos.

Atte, la mujer que dialoga sin ser respondida.

No hay comentarios: