domingo, 30 de enero de 2011

Relájate que la vida no es más que un viaje, uno tal y como el que acabo de hacer
Viajé mirando al suelo. Comencé mirando un piso de asfalto, hierviente, oscuro, sucio, feo; y llegué a un suelo que era transparente, azul y con vida: el mar.
Olvida todo aquello que no es más que el pasado, repleto de problemas que no hacen más que agobiar tu vida actual. Relajación. música, y cariño, no se necesita más.





sábado, 15 de enero de 2011

Soy de las que cree firmemente que el calor y el frío son sicológicos.
Soy de las que aún cree en las personas que me han hecho daño.
Soy de las pocas personas que aún disfruta pasar un sábado en le noche en familia.
Soy una de las pocas que cree que el perro no es amigo del hombre, sino que lo es el gato.

Sí, diga lo que piensa, soy una de las tantas idiotas que aun cree.

miércoles, 5 de enero de 2011

Siempre

Cuando leo el horóscopo obligadamente, al hacer el puzzle o el sudoku, leo mi signo y el siguiente por inercia.

lunes, 3 de enero de 2011

Muriendo


Acostada en una sala con un clima frío y poco amoroso estaba yo. Miraba al techo sin pensar nada, solo veía un cielo de color blanco con alguna que otra grieta, estragos de alguna tragedia mayor.
A mi lado la incondicionalidad que lanzaba una lágrima, tomaba mi mano como si fuera la última vez. Aun así, yo no comprendía nada, simplemente escuchaba las voces de quienes decían quererme, todos lloraban, y yo solo miraba fijamente. Mis cuerdas vocales no respondían y mucho menos mi cuerpo. ¿Por que sucedía eso en mí? ¿por qué ella lloraba desconsoladamente diciendo que jamás volvería a ser la misma?. No entiendo.
Ahora mi cuerpo sufre cambios que jamás había experimentado, rígido como nunca lo había sentido, mis ojos se cierran y en el fondo se ciegan cada vez más por una extraña luz. De pronto, no siento nada, solo la lágrima de la mujer incondicional que tenía a mi lado que cae sobre la mano que cogía, sentí su aroma y escuché el pitido de la máquina que decía que ya había muerto.