domingo, 11 de julio de 2010

Monodiálogo


Hola, ¿qué tal?...
siento llegar como minutos atrasada.
Sí, andaba por acá cerca, haciendo compras, por eso no subí por las escaleras a las cuales mirabas. ¿Vamos a comer?
Yo sé, por acá, sígueme.
Subamos por acá, sentemonos aquí, ¿recuerdas cuando veníamos a éste lugar tu y yo?
¡No te rías de la gente!
...
Bajemos de aquí, sí, ya descansé
¿se te extravió algo en mi mano?
Sí, vine a eso también.
Las preguntas son varias.
Más que asumido tengo el hecho de ser insoportable, aun así, sé que hay cariño.
Ves, tu risa te delata.
Yo igual, pero es mejor así.
Te apoyo, bajemos, vamos donde antes.
Pisemos las hojas
Hagamos inmortal nuestros pies pisándolas
Sácala tu, para ver si sale más linda
Sí, verdaderamente, son lindas las hojas.
Una gran araucaria es, lo puesto, pero no seas pillo
Ganaste, bueno si soy una mujer de palabra, cumpliré.
(pasado los diez minutos)
Cumplí, ¿ves?
libros, gente con estilo, fotografías vaya a saber uno para qué!
Vámonos.
Proyectos ecológicos, ¿los viste?
Hombres de madera colgantes, ¿recuerdas?
Adiós, no sé
(mil y una de carcajadas)
Adiós, nuevamente.
En tu nombre, yo le digo.
Adiós, una y otra vez.
Señales de un lado a otro.
Adiós.

No hay comentarios: