La Cresta, es un lugar tranquilo y muy bello, sus habitantes, no te hablan si tú no quieres hacerlo, no te meten en problemas ni mucho menos en cahuines baratos (de esos que no se cree nadie) y para qué decir, la gente es alegre y hasta se preocupa por ti.
Como toda localidad, también tiene un lugar un tanto marginal, la denominada Shusha, que también, no deja de ser un lugar cómodo para la gente que es "mandada" para éste lugar; ahí es verdadero que nadie habla con nadie, pues quienes acuden al lugar, lo hacen de manera obligada y sin querer.
En conclusión, prefiero irme a la Cresta un ratito y que nadie me saque de ahí. Por el bien mio y de los demás.
Gracias.-
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